Tipos de mordida y su tratamiento (ortodoncia)

Además de resolver alteraciones estéticas, la ortodoncia es una excelente solución para tratar los problemas de oclusión. Pero ¿cuáles son los más frecuentes? En este post vamos a enumerar los tipos de mordida más comunes y los tratamientos indicados para corregirlos. ¡Descubre todos los detalles!

Mordida abierta

Debido a factores genéticos o por llevar a cabo determinados hábitos, la mordida abierta es aquella que se caracteriza por la falta de unión entre los dientes superiores e inferiores. Por ello, las personas que padecen este problema tienen dificultades para masticar. En estos casos, la mejor opción es llevar a cabo un tratamiento de ortodoncia y en determinadas situaciones realizar una cirugía ortognática.

Clase II

La maloclusión de clase II se caracteriza por el efecto óptico de dientes superiores hacia afuera o adelantados. Esta situación se debe a un sobrecrecimiento del maxilar superior o a la falta de crecimiento de la mandíbula. Su origen puede ser óseo o dentario. Se pueden corregir con ortopedia en aquellos pacientes infantiles que estén en fase de crecimiento y con ortodoncia o cirugía ortognática en el caso de los adultos.

Sobremordida

Aunque a nivel estético no suele notarse tanto, la sobremordida es un problema de oclusión que se caracteriza por la superposición de los dientes del maxilar superior sobre los del maxilar inferior. Lo idóneo es que los dientes superiores tapen solamente un tercio de los inferiores más o menos. Esta patología, que también se conoce como mordida profunda, normalmente es hereditaria y está relacionada con la posición de los huesos, afectando a la forma de hablar. Al igual que los casos anteriores, este tipo de alteraciones se podría corregir con ortodoncia o con cirugía ortognática, dependiendo de la gravedad de cada paciente.

Clase III

Cuando la mandíbula se encuentra por encima del maxilar se produce una maloclusión de clase III. Puede tener origen esquelético o dentario. En el primer caso, durante la fase de crecimiento la mandíbula se desarrolla más de lo que debería; mientras que en caso de que el origen sea dentario, los dientes de abajo quedan por encima de los de arriba. Cuando la causa del problema es ósea, se podría corregir en fase infantil con ortopedia y en adultos con cirugía ortognática, y si es dentaria, con ortodoncia.

Mordida cruzada

En los casos en los que el mentón sobresale, además de generar un problema estético, indica que existe una mordida cruzada. Es decir, las piezas dentales inferiores se superponen sobre las superiores. En estos casos, el hueso maxilar suele ser demasiado estrecho y/o la mandíbula muy ancha. Se trata de una alteración que se puede corregir con brackets. En los casos más severos, con cirugía ortognática.

Mordida adecuada

Conocida también como clase I, se produce cuando los dientes superiores e inferiores encajan perfectamente. Es la mordida correcta, por lo que, en estos casos, no hay que llevar a cabo un tratamiento corrector.

De todos modos, recuerda que una boca que no muerde bien puede generar a lo largo de los años desgastes dentales, encías retraídas, caries, problemas articulares y molestias que afectan a la calidad de vida.

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Recuerda que en Clínica Dental Liandent contamos con un equipo de especialistas ortodoncia, que se encargarán de estudiar tu caso y proporcionarte un tratamiento a tu medida con el que podrás lucir la mejor versión de tu sonrisa.

5 problemas dentales hereditarios

Al igual que con otras partes del cuerpo, la genética puede afectar nuestra boca. Tanto es así que hay enfermedades que vienen de familias. En este artículo te contamos cuáles son los 5 problemas dentales hereditarios más comunes. ¿Te gustaría conocerlos? ¡Sigue leyendo!

1. Periodontitis

Hasta el 30% de la población puede tener una predisposición genética a la enfermedad de las encías. Caracterizado por encías hinchadas y sensibles, este problema común está relacionado con la caries dental y, si no se trata, puede provocar la pérdida de dientes y huesos.

El diagnóstico y tratamiento tempranos pueden ayudar a proteger sus encías y dientes a largo plazo. ¿La enfermedad de las encías es algo con lo que luchan los miembros de su familia? Asegúrese de mencionar esto a su dentista.

2. Caries

Algunas personas son más susceptibles a la temida caries que otras. Al igual que con la periodontitis, también existe un factor genético que predispone a algunos pacientes a una mayor susceptibilidad a la caries dental.

Por ello, es fundamental practicar las máximas medidas de higiene bucal, visitar periódicamente al dentista y llevar un estilo de vida saludable. Lo mismo intentamos transmitir a los pacientes que visitan cada día nuestra clínica dental.

3. Microdoncias

Otro problema bastante común que ocurre entre distintas generaciones de una misma familia es la microdoncia. Es un cambio cosmético que hace referencia al tamaño excesivamente pequeño de ciertas piezas dentales.

Por lo general, esto ocurre en los dientes frontales superiores y se puede resolver con la colocación de carillas dentales.

4. Agenesia dental

La ausencia de uno o más dientes que no se han llegado a formar denomina agenesia dental. Este problema afecta a cerca del 3% de la población, afectando tanto a la estética como a la función de la sonrisa.

La falta de desarrollo de uno o más dientes está relacionada con factores genéticos. Sin embargo, se puede solucionar colocando un implante dental.

5. Hiperdoncia

El ser humano cuenta con 32 piezas dentales en total. En algunos casos con 28, si no tienen muelas del juicio.

Sin embargo, las personas con más de 32 dientes se ven afectadas por una anomalía conocid como hiperdoncia. Aunque no hay una causa específica, se cree que afecta la genética y puede ser un problema genético.

Estos dientes que no deben formarse se llaman supernumerarios y suelen erupcionar en la arcada superior. No solo cambian la estética sino que también pueden afectar la mordida.

¡Si padeces cualquiera de estas afecciones no dudes en visitarnos! En la Clínica Dental Liandent nuestros dentistas de confianza son expertos en tratamientos para cuidar tu salud. Ven a visitarnos y consulta nuestros tratamientos.

¿Cuánto dura un implante dental?

El implante dental es posiblemente uno de los mejores tratamientos para las personas que padecen pérdida dental.

Este tratamiento conlleva una inversión importante de dinero, tiempo y esfuerzo que motivan a los pacientes a cuestionarse sobre la duración de este tratamiento respecto a otro.

Existen muchos factores que pueden afectar la duración del implante en la boca del paciente. Según la Asociación Dental Americanala vida media de un implante es de 25 años.

Un objetivo de un implante es integrarse en el hueso, proceso conocido como osteointegración, y de esta forma durará tanto tiempo como dure el hueso que lo aloje.

Factores que facilitan la durabilidad del implante

 

1. Colocación del implante:

En primer lugar, es esencial una buena colocación del implante dental, rodeado de hueso y encía de calidad.

 

2. Calidad y cantidad de hueso:

También es fundamental que, a la hora de colocar un implante, tu dentista sepa qué tipo de hueso es, qué calidad y cuánto hueso hay, ya que esto también puede afectar a su longevidad.

 

3. Evita el tabaquismo:

Otro factor a tener en cuenta es el estilo de vida. Por ejemplo, fumar no es un factor favorable para la integración del implante con el hueso, de hecho puede producir lo contrario.

Fumar retarda la curación y unión de los huesos, los debilita y puede causar infecciones. Por lo tanto, el tabaco reduce la tasa de éxito del implante.

 

4. Limpieza oral:

La higiene es una de las condiciones más importantes para que el implante dure más tiempo en la boca.

Si después de colocar el implante el paciente no practica una buena higiene, las bacterias comenzarán a acumularse en la zona del implante, creando una inflamación de la mucosa o de las encías. Esta inflamación, conocida como mucositis, y si no se alivia o trata, puede dar lugar a una periimplantitis, es decir, una inflamación del sitio del implante que también se acompaña de pérdida ósea. Si se pierde demasiado hueso, el implante perderá su agarre y lo más probable es que falle.

Lo ideal es seguir las instrucciones de higiene oral y acudir a las revisiones que le da su dentista. Las instrucciones que se deben seguir será:

  • Cepillarse los dientes al menos 2 veces al día.
  • Uso del hilo dental y/o cepillos interdentales.

 

5. Enfermedades crónicas:

También es importante señalar que existen una serie de enfermedades sistémicas como la diabetes que pueden reducir la duración de implantes, debido a la relación entre la enfermedad y los procesos de cicatrización y regeneración.

 

6. Colocación del implante:

Además del implante, también hay que tener en cuenta la corona sobre el implante (diente o maxilar), que suele durar un poco menos, una media de 10 – 15 años, pero si se pierde es más fácil de reponer que un implante. 

La vida útil de una corona de implante puede depender del material del que está hecha. Las complicaciones más comunes en la colocación de implantes son el aflojamiento de la corona del implante y pequeñas grietas en la cubierta del implante.

Finalmente, nada mejor que acudir a un especialista para conocer más acerca de tu caso único, no dudes en contactar con nosotros o acudir a Liandent.

¡Estaremos encantados de poder atenderte y ayudarte en todo lo que necesites! 

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